Una tierra única
Si desea explorar la zona durante su estancia, encontrará arenas blancas, aguas cristalinas y lava solidificada a cinco minutos hacia la costa. Le recomendamos la Playa de Papagayo, un paraje natural y protegido a 8.5 km de Playa Blanca. En dirección opuesta, encontrará el Parque Nacional de Timanfaya, con su imponente tonalidad de colores y sus decenas de volcanes, como las Montañas de Fuego.
La peculiaridad del terreno de la isla implica la existencia de una serie de enclaves naturales únicos: Los Hervideros, la Cueva de los Verdes, La Geria o las Salinas de Janubio, entre otros. Le invitamos a explorar los caminos de lava, ceniza volcánica y flora exótica.
La cercanía a la costa le ofrece la posibilidad de practicar windsurf, buceo, pesca u otros deportes acuáticos. Si prefiere las actividades fuera del agua, podrá disfrutar del Lanzarote Golf Club a media hora en coche. El clima suave, con gran número de horas de sol durante casi todo el año, garantizará una estancia completa.